Diseño del blog

EL CURTIDO DE LAS PIELES, UN ESPECTÁCULO ARTESANAL Y CULTURAL INSÓLITO EN FEZ

Laureano Gomez Nurias • nov 04, 2019

EL CURTIDO DE LAS PIELES, UN ESPECTÁCULO ARTESANAL Y CULTURAL INSÓLITO EN FEZ

¿Te has preguntado alguna vez cómo las pieles animales se hacen útiles? La plaza de los curtidores, o también conocida como las Curtidurías, en la Medina de Fez, responde claramente a esta pregunta. De la manera más tradicional posible, la plaza se rellena de grandes cubetas de piedra o noques, de tonos teja y blanco, donde se pueden observar hombres lavando y frotando piel; un estampado de colmena que chocará con las líneas verticales y horizontales que predominan en el paisaje fasí.

Para ver más de cerca esta actividad artesanal más tradicional y característica de la ciudad. Se puede acceder a ella atravesando de oeste a este la Medina El Bali de Fez. Esta zona cuenta con cuatro plazas que se dedican a curtir pieles, pero sin duda, la más conocida es la de Chouwara.

Si optamos por una vista desde arriba accediendo por una de las tiendas situadas alrededor de la plaza, podremos observar que, las cubetas rojizas, las blancas y los tenderos de piel corresponden a los pasos que hay que seguir para realizar el proceso de curtido de pieles de camello, cordero, buey, cabra o dromedario, al más puro estilo marroquí.
EL OFICIO DEL CURTIDOR

El primer paso que se realiza en las curtidurías tradicionales es introducir las pieles en enormes cubas repletas de cal y excrementos de paloma, donde se dejan en reposo durante varios días.

Es reconocido como uno de los más duros de Marruecos, muy recurrente en Fez, ya que, aunque los trabajadores tengan una vara con la que remover las pieles en el interior de la cubeta, en ocasiones, los curtidores suelen meterse en el interior de estas.
Actualmente, es uno de los oficios más antiguos del mundo; de esos que pasan de generación en generación. Las pieles que se tratan en este lugar se utilizan para la elaboración de bolsos, carteras o cinturones de cuero; productos de alta calidad realizados mediante el esfuerzo de numerosos trabajadores marroquíes a sol y sombra en estas curtidurías.

Es un espectáculo en el que se plasma perfectamente la tradición y la cultura de la sociedad marroquí desde otra parte de la artesanía tal y como la conocemos. Un oficio que pervive desde la Edad Media y que, no deja de sorprender desde todos los ámbitos, ya sea desde su historia, sus bases y el esfuerzo que este supone. Independientemente del olor que desprendan las telas y las cubetas, echar un vistazo en la curtiduría es una visita imprescindible en vuestro viaje a Fez.

Como pago por la asistencia al dantesco espectáculo es muy común que traten de vender alguna pieza de piel a los turistas, aunque con una pequeña propina quedarán satisfechos.
Share by: