Como cada 29 de julio, en la iglesia de Santa Marta de Ribarteme se celebra una de las tradiciones más antiguas de Galicia y sin duda una de las más especiales de cuantas hay en el mundo: “A romaxe dos cadaleitos” (La romería de los ataúdes). Desde hace siglos muchos devotos que padecen una grave enfermedad se ofrecen a la santa para salir en procesión si no mueren. De esta manera, se celebra este curioso cortejo fúnebre que en lugar de muertos en los ataúdes lleva vivos. 

Son portados por los familiares, que dan gracias a Santa Marta por llevar a hombros a un vivo. Personas dan la vuelta a la iglesia de rodillas para entrar y rezar ante la imagen de Santa Marta. Otras muchas se visten con una especie de gasa blanca que hace las veces de mortaja y desfilan junto a los féretros portando velas encendidas. Las campanas repican mientras la multitudinaria procesión abandona la pequeña iglesia encabezada por las imágenes de San Benito, la Virgen del Carmen y Santa Marta mientras muchos fieles entonan salmos y oraciones y la banda de música acompaña con una letanía que hace que todo el conjunto ponga la carne de gallina. 

Los que van en los ataúdes soportan estoicamente la nube de fotógrafos y cámaras que se agolpan para inmortalizar esta muestra de fe. Este año un equipo de FOTO XPLORA ESPAÑA nos desplazamos para realizar un archivo documental gráfico. Estamos recorriendo España en busca de las tradiciones más ancestrales, clanes tradicionales, comunidades culturales. Si es posible el mismo Laureano Gómez y Toñi Hermosilla participaran en estas costumbres para así poder conocerlas mejor de primera mano y poder mostrarlas al mundo. 

Nunca habíamos asistido a la romería de Santa Marta de Ribarteme y quedamos impresionados por las miles de personas que allí se congregaban por la impresionante demostración de fe de los que son portados en los ataúdes que habrían ocupado sin la intervención de la santa. Esta es una de las tradiciones más curiosas que hay en Galicia, tierra rica en tradiciones. Son estas muestras de fervor popular las que hacen esta tierra tan mágica y maravillosa. Una vez acabada la procesión de los ataúdes el resto del día continúa con una romería popular donde la alegría, la buena comida y bebida exaltan el triunfo de la vida sobre la muerte.